Patrick LaMontagne es un dibujante editorial y pintor digital canadiense, y viendo ejemplos de cada uno, nunca adivinarías que los ha hecho la misma persona.
Como dibujante, se burla de los acontecimientos actuales (supongo que en Canadá pasan cosas) con un estilo brillante y simplificado.
En sus obras de arte, pinta animales, casi hasta el fotorrealismo.
Y también es Youtuber. En su vídeo más reciente, "Voces", repasa algunos de los ejemplos más comunes de autoconversaciones negativas y objeciones internas a las que se enfrentan los artistas mientras pinta a toda velocidad un lémur en la Wacom One.
Sin embargo, tendrás que quedarte con él durante un comienzo duro: Los dos primeros minutos los dedica a enumerar algunas cosas que podrían resultar demasiado cercanas para muchos de los que le escuchamos, pero, como habrás adivinado, al final las desmiente, dando paso a la idea de que, independientemente de la etapa de tu carrera en la que te encuentres, nunca desaparecen.
Esto puede hacerte temer por el futuro, pero también puede ser tranquilizador, sobre todo para quienes vemos a los artistas supertalentosos como sobrehumanos. Es fácil engañarse pensando que los artistas más consolidados atraviesan sus carreras con confianza y seguridad, sabiendo que todo lo que hacen es brillante y que nunca les dolerán las oportunidades de trabajo.
No. Hay ciertas inseguridades que nunca desaparecen. Pero cuando pienses en ello, te darás cuenta de que eso se debe a que no hay un punto fijo en el que de repente merezcas autoestima. Ya lo sabes.
Por último, Patrick también es un prolífico bloguero y, como complemento, ha tenido la amabilidad de escribir una historia de su relación con la pen tablet de Wacom, que culmina con sus impresiones sobre la Wacom One.
La versión TL;DR:
Patrick fue uno de los primeros en adoptar el arte digital. Consiguió su primera pen tablet -una Wacom Intuos 1- en 1998, cuando consiguió su primer trabajo como dibujante. "A algunos les parecía complicado, pero a mí me parecía una prótesis que me faltaba", dice.
No tiene formación formal y nunca ha trabajado sobre lienzo, sino que ha experimentado cada generación e iteración de hardware y software de arte digital.
En cuanto al software, prefiere Photoshop, aunque dice que "los he probado todos". Y en cuanto al hardware, "una pen tablet Wacom no era una opción. Era una exigencia". Y la Wacom One, dice, es "mejor que todas las pen tablet y pantallas que utilicé durante la mayor parte de mi carrera profesional".
Es una afirmación atrevida, pero nos alegra oírla.